viernes, 17 de octubre de 2014

La maldición de los móviles blancos

Dicen que hace tiempo, una chica fue maldita por una bruja con un poderoso maleficio.
"Y blancos serán tus teléfonos hasta el día en que perezcas".


Na, es broma. Nadie diría algo así.


Resulta que se me ha cumplido el contrato con mi compañía telefónica, así que he decidido cambiarme a Amena porque quiero sentirme libre como el mar y todas esas chorradas. Porque he estado pagando un pastón por una mierda de conexión a Internet por culpa de tener que aguantar la dichosa permanencia.
Después de un agotador juego macabro plagado de contraofertas, de "llama aquí" y "llama allá" por fin decido quedarme donde estaba. Y cuando ya tengo claro que no, que yo no quiero atarme a nadie y que quiero poder abandonar el barco cuando me dé la real gana, va y me ofrecen un móvil por 0€ con el que podré disfrutar de un increíble 4G (ya que mi nueva y mejorada tarifa lo incluye).

Y me vendo. Porque la libertad a veces está sobrevalorada, y que te regalen un móvil de casi 300 euros también mola. Mola bastante.

Pero es aquí cuando empieza lo bueno. Lo de buscar en Internet las opiniones o "reviews" (que ahora están tan de moda) de los modelos que la compañía me ofrece como una ganga.
Pantalla, peso, cámara, procesador... y no sé cuántas mierdas más que no entiendo. ¿Interfaz? ¿Qué coño es eso? Sistema Operativo Android Kit Kat... ¿Nos hemos vuelto locos? Yo era feliz relacionando esa palabra ÚNICAMENTE con las barritas de chocolate. Eran tiempos más sencillos.

Miro, remiro, requetemiro... y al final me decido por uno. Uno que está en varios colores, por cierto, pero que desgraciadamente en mi compañía solo me pueden ofrecer en blanco.

Blanco...
Otra vez...
Cuarto móvil consecutivo de ese color (que no es un color)...
Y no es que no me guste el blanco, para nada. Es solo que después de tanto tiempo estampando plástico blanco (sí, se me caen bastante), me apetecía cambiar y destrozar algo diferente.

En fin, siempre puedo comprarme una funda bonita o pintarlo con rotulador permanente.

2 comentarios:

  1. Pues fíjate... yo nunca he tenido un móvil blanco, y mira que me gustan. Todos han sido negros, que los odio, excepto el S3 que lo tuve azul... Y bueno, antes de los smartphone sí que tuve otros de otros colores, pero eso es época pasada y ya no cuenta.
    Lo que sí es el follón de las compañías... yo hace ya años que no acepto permanencias.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. He acabado con el S3 blanco de mi hermano jajaja... pero sin permanencia!!
      Yo tenía ganas de un móvil negro, pero no me quejo porque me ha salido gratis jiji.
      Un besote, guapa! Gracias por pasar :)

      Eliminar